Mi trauma con el Niño Jesús…
Recuerdo claramente la cocina del apartamento en donde viví junto a mis padres y hermano por allá en los ochenta… estábamos desayunando en Navidad y mi hermanito (cuatro años menor que yo) tenía rato insistiéndome sobre quiénes eran el Niño Jesús…
Luego de unas palabras airadas, empujones y risas irónicas acompañadas de “já, tu no sabes nada, mentiroso!”, yo, una preadolescente de 10 años de edad lo agarré por el brazo y lo arrastré frente a mis padres…
Llegué roja de la rabia y pregunté con voz alta y amenazante: “Papá, Alexander dice que el Niño Jesús no existe y que los regalos lo compran ustedes!!!”
Esperando un regaño de parte de ellos, lo que conseguí fue un absoluto silencio, mi padre se puso rojo como un tomate y mi mamá dejó lo que hacía para verme con unos ojos que nunca olvidaré…
No había nada más que decir… salí corriendo a mi cuarto a llorar cual Magdalena… lo peor fue que mi hermano tenía razón y salió corriendo tras de mi para hablarme del Ratón Pérez… como si la noticia que había recibido minutos antes no hubiese sido suficiente…
Recordé los diciembres anteriores, mis regalos, mi asombro al saber que un pequeño niño podía entregar todos los regalos en el mundo con ayuda de San Nicolás, las cartas “secretas” que escribí, el portarme bien durante el año…
En una oportunidad, en el que recibiríamos la Navidad en casa de mi nona, recuerdo que estábamos como 6 niños en un cuarto y Dayana me despertó porque había bulla afuera… “es él, es él, ya llegó” y nos asomamos…
Lo que vimos fue a un grupo risueño de padres tratando de no hacer ruido metiendo regalos a la sala…
Cuál fue mi razonamiento? El Niño Jesús y San Nicolás estaban apurados y pidieron el favor a los adultos de meter los regalos… SIPI… esa soy yo…
En fin… recuerdo el haber llorado mucho, y durante años he pensado qué hacer con esa tradición y mis hijos… estaba discutiendo este mismo tema con unos amigos y uno de ellos (madre de una niña de 7 años) me dijo: “cómo se le impide a un hijo no mentir después de eso?”
Difícil eh?
El hecho es que todavía tengo mi ilusión infantil… y no quiero que se vaya con los años… en casa de mis padres (cuando paso 24 allí) pongo mi zapato derecho al lado del Nacimiento para que el Niño sepa dónde poner mi regalo y al día siguiente allí está!!!
Cuando no lo paso (como este año) voy a casa de mis padres con la seguridad de que mi mami puso un zapato mío allí y allí estará mi regalo… :D
Así como lo dice Miguel en su blog… quién me dice que el Niño Jesús no existe????
Tags: Venezuela, Navidad, ilusión.
Luego de unas palabras airadas, empujones y risas irónicas acompañadas de “já, tu no sabes nada, mentiroso!”, yo, una preadolescente de 10 años de edad lo agarré por el brazo y lo arrastré frente a mis padres…
Llegué roja de la rabia y pregunté con voz alta y amenazante: “Papá, Alexander dice que el Niño Jesús no existe y que los regalos lo compran ustedes!!!”
Esperando un regaño de parte de ellos, lo que conseguí fue un absoluto silencio, mi padre se puso rojo como un tomate y mi mamá dejó lo que hacía para verme con unos ojos que nunca olvidaré…
No había nada más que decir… salí corriendo a mi cuarto a llorar cual Magdalena… lo peor fue que mi hermano tenía razón y salió corriendo tras de mi para hablarme del Ratón Pérez… como si la noticia que había recibido minutos antes no hubiese sido suficiente…
Recordé los diciembres anteriores, mis regalos, mi asombro al saber que un pequeño niño podía entregar todos los regalos en el mundo con ayuda de San Nicolás, las cartas “secretas” que escribí, el portarme bien durante el año…
En una oportunidad, en el que recibiríamos la Navidad en casa de mi nona, recuerdo que estábamos como 6 niños en un cuarto y Dayana me despertó porque había bulla afuera… “es él, es él, ya llegó” y nos asomamos…
Lo que vimos fue a un grupo risueño de padres tratando de no hacer ruido metiendo regalos a la sala…
Cuál fue mi razonamiento? El Niño Jesús y San Nicolás estaban apurados y pidieron el favor a los adultos de meter los regalos… SIPI… esa soy yo…
En fin… recuerdo el haber llorado mucho, y durante años he pensado qué hacer con esa tradición y mis hijos… estaba discutiendo este mismo tema con unos amigos y uno de ellos (madre de una niña de 7 años) me dijo: “cómo se le impide a un hijo no mentir después de eso?”
Difícil eh?
El hecho es que todavía tengo mi ilusión infantil… y no quiero que se vaya con los años… en casa de mis padres (cuando paso 24 allí) pongo mi zapato derecho al lado del Nacimiento para que el Niño sepa dónde poner mi regalo y al día siguiente allí está!!!
Cuando no lo paso (como este año) voy a casa de mis padres con la seguridad de que mi mami puso un zapato mío allí y allí estará mi regalo… :D
Así como lo dice Miguel en su blog… quién me dice que el Niño Jesús no existe????
Tags: Venezuela, Navidad, ilusión.
11 comentarios:
El niño jesus simplemente deja de existir como lo creímos de niños y pasa a existir de una manera mas bonita,digo yo.
Feliz Navidad!
Que lindo tu post Evelyn, yo tengo el mismo problema con mi hijo mayor (Gabriel) que ya tiene 7 y no se cuando decirle la verdad.
Quería aprovechar para decirte que mañana se realizara otra campaña de Abrazos Gratis, se que es tarde para avisar pero visita mi blog, alli está toda la información.
Queeeee? Cómo te rompen la magia de creer????
Un abrazo y feliz 2007!
Pienso que el niño jesus, es esa magia que nos hace creer en navidad, es nuestra primera ilusión, besos y feliz año
El Niño Jesús que trae regalos, es una de las tradiciones mas bonitas que tenemos cuando somos chamos, son las mejores Navidades que recuerdo. Le agradezco tanto a mis padres y hermanos mayores el haber conservado en mi esa maravillosa ilusiòn mientras mi inocencia lo permitió.
Además del Niño Jesús, en mi casa, según la tradición de mi familia, llegaba "La Befana" una bruja buena, montada en su escoba con regalos para los niños que se portan bien y carbones para los que se portan mal, estos eran dejados en una media que se ponia cerca de la cama.
Evelyn, con este excelente post me has hecho volver atras unos años y recordar, aunque con mucha nostalgia, las mejores Navidades de mi vida, gracias por eso!!!
Feliz Año 2007 para ti y todos los tuyos.
Un abrazo.
SB
Eve se me arrugó el corazoncito con esa historia, que horrible. Pobrecita niña desengañada... Yo sí les diré a mis chiquitines que el Niño Jesús sí existe, y poco a poco pasaré a las etapas de: "los padres colaboran con él" y llegaré hasta "el Niño permite que los papás tengan el dinero para comprarte los regalos", todo sea por dejarlos crecer a un ritmo sano, con ingenuidad, inocencia e ilusiones bonitas como esas. Romper esa magia es un daño mayor que dejarlos creer en esos bellos mitos y fantasías.
Un beso y lo mejor del mundo para el año por venir.
:-)
Qué bello recuerdo Eve.
Creo que muchos podemos echar un cuento de 'en dónde estabas cuando descubriste que el Niño Jesús no existía'. Es uno de esos momentos definitorios en la vida.
Casualmente pensaba el día de Navidad que mis sobrinos (y por ende, mis hijos) probablemente descubrirán la verdad haciendo una pregunta en google.
A mí me lo dijo mi mamá, quien tuvo la cortesía de esperar hasta que yo se lo preguntara de frente (y contestar con la verdad). Me acuerdo el corolario exacto: 'Pero en verdad sí existe, el Niño Jesús es el que ayuda a tu papá durante todo el año para que él pueda comprarte tus regalos'.
Curiosa: tienes razón, puede ser vista como más bonita... pues no está la mentira de por medio pero sigue la ilusión :D
Victor: no envidio tu posición al enfrentarte en algún momento con tu chamo...
Si Marcel así de cruel fue :(
Lindísima igual para ti... sin duda es una gran y bonita experiencia.
SB me encanta que lo hayas disfrutado tanto como cuando lo escribí... es impresionante como tu cerebro guarda sensaciones... gracias por compartir la tradición de tu familia!
Depr001 linda respuesta la de tu mamá, y sí, posiblemente "gracias" a Internet muchos descubrieron la verdad este año...
Pues Eve, yo no lo voy a dejar de hacer.
Siendo niño es que sueñas y te ilusionas, sin preocupaciones, románticamente, y eso se va con el tiempo... ¿acaso soñamos hoy al mismo nivel que antes?
Haber soñado, creído, jugado, haber sido románticamente ingenua es el "ancla" que me permite ser un adulto sano emocionalmente, y eso es invaluable.
¡Viva San Nicolás y su combo!
Pues aquí tenemos los Reyes Magos esta noche del cinco al seis de Enero y a mi edad sigo teniendo la misma ilusión de siempre.
Así es Monique!!!
Gracias Rodríguez por pasar por acá y recordar a los Reyes Magos como otra bella ilusión y tradición navideña!!!
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