Día 8: de mercado 28, presidente, cuentas y regreso a la realidad...

Jueves, 15 de noviembre de 2007

Desayuno divino, bajamos las maletas y nos dispusimos a cerrar la cuenta del hotel… suuuuuuuuusto, a pasar rabietas porque nos cobraron más de 50 US$ en propinas que no autorizamos (José peleó tanto que pudimos dejar lo que nos parecía y no lo que nos querían cobrar), a discutir porque nos cobraron sin permiso de una tarjeta de crédito en particular quitándole lo que le quedaba de cupo para compras en Internet a José (sí amigos del exterior, nosotros tenemos un cupo limitado por el gobierno para hacer uso de nuestras propias tarjetas de crédito en compras de moneda no venezolana).

Pero respiramos profundo, nos asomamos por la ventana, agarramos nuestros cachachas y recobramos nuestras sonrisas por haberla pasado tan pero tan bien esos últimos días…

Nos fuimos a conocer el centro de Cancún, nos quedamos locos con el poco tráfico que había, pero nos dijeron que se debía a que estábamos en temporada baja. Al llegar al Mercado 28, conseguimos algo similar a Quinta Crespo (en Caracas) pero organizado y seguro.

Tarantines por doquier, con excelentes precios y variedad; músicos (hasta uno con un arpa) en las esquinas, baños súper limpios, personas de culturas infinitas... Allí nos preguntaban "qué onda con chávez" y quedaban sorprendidos de que le aseguráramos que lo que pensaban no era exageración...

Muchos nos decían que estaban tristes por los venezolanos, que ellos no permitieron que un loco parecido los gobernara (recuerda que estábamos en un mercado no en un centro comercial), que debíamos ser fuertes y tener esperanzas… lo que más les sorprendió es que no pudiésemos usar nuestro dinero como nos diera la gana a causa del control cambiario; y la paranoia que todos los venezolanos les demostraban a raíz de la inseguridad a la que estamos acostumbrados en nuestro país…

Al llegar al aeropuerto, nos lanzamos a Ciudad de México para tomar nuestra conexión a Maiquetía… ¿cuál fue nuestra sorpresa en pleno vuelo? Que aterrizaríamos primero en otra ciudad a buscar a unos pasajeros que se quedaron embarcados… ¿llegaríamos a tiempo? ¿perderíamos el vuelo de regreso a nuestra mal querida tierra?

De vaina… llegamos a Ciudad de México a correr (literalmente), debido a la hora estaban cerradas algunas entradas y teníamos que dar vueltas más largas para llegar a la puerta que nos tocaba. Si no hubiese sido por el abuso de la aerolínea habríamos tenido más de 2 horas de tiempo para aunque sea ir al baño… pero no, resulta que el avión estaba esperando por nosotros…

Uff, luego de tanto trajín llegamos a nuestra tierra (el viernes 16 de noviembre a las 8:00 am), a un país con 3 días de luto por la muerte de Luis Herrera pero que no pusieron las banderas a media hasta, al re-encuentro con las marchas y los estudiantes, a escuchar el paso doble “por qué no te callas”, a la mala atención, a la falta de leche, al terror por la reforma.

Pero a pesar de todo, aquí estamos y aquí seguimos… hasta que nos boten… con el recuerdo de un viaje espectacular, al que no le cambiaría nada…

Deseando que nuestro ministro del turismo se eche un paseo (de negocios!!!!!) por aquellas tierras a ver si aprende algo... rogando que las personas que trabajan para empresas que brindan servicios entiendan qué es lo que deberían hacer con el turista (y no turista) en este país...

Tags: Cancun, Venezuela, chávez, vacaciones.